Incertidumbre asociada a la localización de landmarks cefalométricos: esta fuente de incertidumbre está asociada a la extrema dificultad de localizar los puntos de una manera completamente reproducible. La variabilidad puede darse por:
a) Variaciones en la distribución de sombras dependientes de las condiciones de luz durante la toma de la fotografía.
b) Enfoque de cámara inadecuado, especialmente cuando el plano de enfoque es demasiado superficial y, por lo tanto, las características críticas no son nítidas.
c) Mala calidad de la imagen. Por ejemplo, baja resolución.
d) La postura de la cara en la fotografía. Por ejemplo, la expresión facial o el ángulo de vista (frontal, lateral u oblicuo).
e) Oclusión de ciertos landmarks debido a elementos como el pelo o las gafas.
f) Definición imprecisa de algunos landmarks antropométricos, puede deberse tanto a la terminología ambigua o la escasa definición anatómica.
Incertidumbre asociada a la coincidencia de los landmarks: se refiere a la imprecisión que implica la coincidencia de dos conjuntos de landmarks potencialmente correspondientes, derivados de dos objetos diferentes (una cara y un cráneo).
a) La correspondencia entre los puntos antropométricos faciales y craneales no siempre es simétrica y perpendicular a la superficie de la piel y al hueso subyacente.
b) La profundidad del tejido blando facial varía para cada punto cefalométrico, así como para diferentes poblaciones (según edad, ascendencia y sexo).
c) Consideraciones sobre como las distancias entre puntos antropométricos potencialmente correspondientes se ven afectadas por la postura y la expresión facial de la imagen.
d) Existen muchos estudios que describen la incertidumbre relacionada con las diferentes profundidades de tejido blando para diferentes poblaciones, pero casi ninguno de ellos consideró la proyección de esas distancias en la fotografía AM utilizada en la comparación.
Incertidumbre de la superposición de la cara y el cráneo: no hay una forma de cuantificar de manera precisa cuando se ha logrado una superposición.
Hay muchos parámetros desconocidos (y / o inciertos) involucrados en la replicación de las condiciones originales de la fotografía.
Los criterios morfológicos son subjetivos y difíciles de cuantificar.
La cantidad de criterios morfológicos que deben de cumplirse para lograr una identificación positiva.
Los efectos de los cambios dentales detectados del examen de las fotografías AM utilizadas para comparar con el cráneo, así como su interpretación precisa.
Los cambios relacionados con la edad en la morfología craneofacial de los niños deben ser investigados y documentados más exhaustivamente antes de que las comparaciones entre imágenes tomadas en diferentes momentos durante la infancia puedan ser comparadas.
Las siguientes “buenas prácticas” y “prácticas que deben evitarse” representan algunas pautas para minimizar o evitar las principales fuentes de error, así como tratar con las fuentes de incertidumbre que son concomitantes a la aplicación de la técnica.
Estos pasos deben ser vistos como recomendaciones y bajo ninguna circunstancia deben ser percibidos como requisitos para lograr un resultado “válido”. Los autores son plenamente conscientes de que las circunstancias de cada caso deben ser tomadas en cuenta al evaluar los resultados de una identificación basada en SCF.